Joan Miquel Llodrà

Entrevistamos a Joan Miquel Llodrà, guía turístico de Arenys de Mar.

Joan Miquel, explícame ¿dónde estamos?

Estamos en el cementerio municipal de Arenys de Mar, conocido por todos como cementerio de Sinera. Aquí, de hecho, tenemos enterrado al poeta Salvador Espriu y ya sabemos que es él precisamente quien sitúa parte de su universo literario en Sinera, que es el nombre de Arenys al revés. Aunque puedes identificar a Arenys en su creación, él siempre dijo que Sinera podía ser cualquier pueblo.

¿Y qué podemos ver en este cementerio? ¿Por qué es tan interesante?

Aparte de que el propio poeta Espriu está enterrado, sobre todo es importante por su escultura funeraria de finales del XIX y comienzos del siglo XX. Hay dos estatuas modernistas del gran Josep Llimona, una de ellas el Silencio de los Muertos, que dicen los expertos es una de sus mejores obras; y también tenemos esculturas de Josep Carcassó, Venanci Vallmitjana y Frederic Marès. Y después, en el ámbito arquitectónico tenemos dos panteones, uno está hecho por Antoni Rovira i Rabassa y el otro es atribuido a Enric Sagnier y Eusebi Arnau. Además el cementerio está construido en tres terrazas en un lugar emblemático: en lo más alto, alrededor de la capilla de la Piedad, es donde están los panteones más importantes. Un poco como en la sociedad de los vivos también se organiza la sociedad de los muertos, con esta diferencia de clases.

¿Y qué nos queda en Arenys de los burgueses que se levantaron esos sepulcros tan suntuosos?

Hay un plano de este cementerio con el que puedes ir siguiendo los panteones y cada panteón te habla del patrimonio arquitectónico vinculado abajo al pueblo. Por ejemplo, ves el Hipogeo de la familia Mollfulleda (hecho por Joan Barrera) donde está enterrado el fundador de la destilería de licor Calisay y el plano te indica que la antigua fábrica Calisay es hoy el Centro Cultural de la ayuntamiento. Con esto la gente no aparca aquí y se va, sino que se interesan por ir a ver el patrimonio inmueble de Arenys de Mar. Y en el centro tenemos también algunos edificios que se hicieron gracias a los indianos que al regresar de América hicieron obras de beneficencia para el pueblo. Un ejemplo es Antoni Torrent, que impulsó la construcción del Asilo Torrent por la gente mayor desamparada y que aquí conocemos como "las hermanitas" porque se habían hecho cargo unas monjas. Es un edificio espectacular.

Aparte de eso, cuando vienes a Arenys ¿qué no te puedes perder?

Aquí hay que venir a pasear por la Riera que está dividida en dos: la Rambla Obispo Pol y la Rambla Padre Fidel Fita. Es una de las rieras más emblemáticas del Maresme y la arteria más importante de Arenys con su arboleda de plátanos y sus comercios y terrazas. Pero no sólo es importante comercialmente sino también en el aspecto lúdico y festivo porque cualquier celebración del pueblo casi siempre comienza, termina o pasa por la Riera. Es un lugar importantísimo en el que tenemos los grandes edificios como el ayuntamiento, el edificio del mercado, el hospital Xifré y la iglesia de Santa Maria, que tiene un retablo barroco impresionante de dieciocho metros de altura, obra de Pau Costa. Los sábados por la mañana la asociación Amics del Retaule realizan visitas guiadas para conocerlo. Y después tenemos el puerto que se divide en dos partes, la de ocio náutico y el puerto pesquero, muy dinámico y muy conocido sobre todo en época de calamar y gamba.

¿Tiene alguna festividad identitaria de Arenys?

Ligándolo con el puerto, hace ya años que se celebran las Jornadas Gastronómicas Calamarenys, cuando casi todos los restaurantes y bares del pueblo ofrecen en su carta algún plato relacionado con el calamar. Y después aparte de San Juan y San Pedro que inauguran la temporada festiva de verano, el 9 de julio es San Zenón que es el patrón de Arenys (aquí no lo llamamos Zenón sino Zenon, que es un dialectalismo totalmente correcto, eh?). San Zenon quizás es uno de los actos más emblemáticos del pueblo: el día 8 de julio por la noche casi todo el pueblo se reúne para cantar el himno en San Zenon y no te imagines una iglesia con cuatro personas cantando no, no… la realidad es que no se ninguno de tanta gente que acude.

Si tuvieras que elegir un lugar especial de Arenys…

Te diría la plaza Salvador Espriu en lo alto de la colina de la Piedad donde está el cementerio. Desde ella existe una vista panorámica de todo el litoral. Es un rincón muy bonito, muy calmado, con el mar delante... la gente que hemos vivido siempre junto al mar aquí tenemos todo lo que necesitamos: a un lado el pueblo y al otro el mar.

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